Autor: Micaela Gómez
Edición: Daniel Romero-Alvarez
Referencia original:
Arteaga, C., Boix, N., Teixido, E., Marizande, F., Cadena, S., & Bustillos, A. (2021). The zebrafish embryo as a model to test protective effects of food antioxidant compounds. Molecules, 26(19), 5786. https://doi.org/10.3390/molecules26195786
Los antioxidantes han sido catalogados como compuestos naturales esenciales para prevenir el deterioro celular que deriva en enfermedades como el cáncer y envejecimiento prematuro. Sin embargo, la investigación sobre los efectos protectores de los antioxidantes en modelos vivos no se ha estudiado a profundidad. Por este motivo, los autores de este estudio buscaron evaluar el rendimiento de nueve compuestos antioxidantes bajo condiciones novedosas.
Específicamente, se buscó identificar si diferentes antioxidantes presentes naturalmente en alimentos, como los fenólicos y carotenoides, son capaces de proteger a embriones de peces cebra (Danio rerio) de altas tasas de letalidad y malformaciones causadas por un agente altamente tóxico: el hidroperóxido de terc-butilo (tBOOH).
Inicialmente, se descubrió que ocho de las nueve moléculas antioxidantes analizadas tenían efectos protectores significativos contra la letalidad de los embriones de los peces cebra, lo que sugiere la capacidad de atenuar los efectos tóxicos de tBOOH a nivel celular. Entre estas moléculas, únicamente tres presentaron estas mismas facultades protectoras contra las malformaciones embrionarias causadas por el agente químico. Curiosamente, se registró un solo antioxidante perjudicial contra las células, es decir, su administración aumentaba el efecto tóxico a nivel embrionario en peces cebra.
A través de este estudio, los investigadores lograron identificar que los antioxidantes presentes de forma natural en la dieta, en alimentos como naranjas, uvas, brócoli o café, pueden asociarse bastante bien a una protección celular contra el daño causado por especies reactivas, generadas por nuestro propio cuerpo o suministradas de manera artificial. Su inclusión en la dieta puede ayudar a promover un buen estado de salud para prevenir, a futuro, un desequilibrio a nivel celular que promueva el desarrollo de enfermedades crónicas de importancia médica.
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